top of page

¡Te prometí que un día me follarías!

Ese día tenía muchas ganas. El sumiso de la sesión anterior me había lamido el coño pero no había conseguido que me corriera, lo que le había valido unos cuantos golpes con mi varita.

¡Cuando llegaste y empezó la sesión te vi muy excitado! Así que te pregunté si querías follarme a mí, tu Ama. Me dijiste que sí con ilusión. Entonces te expliqué que mi deseo era lo único que contaba y que ibas a follarme como yo quisiera... Acabaste haciéndome correr, ¡tu nariz olfateando mi ano!


Si te gusta este tipo de juego, contacta con Señora Artemisa : https://domina-artemisa.wixsite.com/my-site/about-3-2


¿Cómo se puede decir que no a un hombre que nos dice que sí con tanto entusiasmo?


 
 
 

Comments


bottom of page