A él creo que le excita mucho, ¡a mí me relaja! Si te mereces unos buenos azotes, ponte en contacto con Señora Artemisa:...

“Estas esperandome tumbado boca arriba. Es con muchisimo gusto que me voy a sentar sobre tu cara.” Señora Artemisa - Madrid, en sesión...

Elegí vestirme para excitarte al máximo, porque conozco tus fetiches. Y lo que es más, ¡sé que eres incapaz de resistirte a una mujer...

Este sumiso se jactaba insistentemente, sesión tras sesión, de que podía hacer que me corriera con su lengua. Finalmente cedí ante él. Le...

Muchos sumisos principiantes me confiesan que tienen miedo al sufrimiento. Y, por supuesto, nunca les obligo a someterse a una práctica...

Los azotes son una de mis prácticas favoritas para relajarme. Me encanta disponer de las nalgas de un sumiso para que vayan cambiando de...

No me canso de azotar a este payaso, equipado con mi arnés. Acaba bajo mis repetidos moviminetos de cadera, penetrado por mi consolador,...

Los disfrutas al máximo porque sabes que la fusta de tu Ama pronto será mordaz. Con mi forma de alternar momentos dulces y dolorosos, te...

Conmigo no quedó decepcionado. No sólo encontró a una mujer sexy que se la ponía dura, sino también a una mujer que sabía cómo cuidar sus...

Cuando le mostraste tu deseo, ella sonrió y te pidió que le enseñaras la polla. Te sacó una foto y te amenazó con denunciarte. Así que...

... sobre todo cuando sé que el sumiso que me ofrece sus nalgas las está disfrutando enormemente, firmemente sujetas a mi potro. Con cada...

Algunos, ¡no todos! - están dispuestos a dejarme usar mi varita en sus nalgas con tal de verme vestida con mis medias de carne, mi...

Al principio en tu primera sesión, me explicaste que no buscabas el dolor. Respete tus deseos y tus limites y empezamos con sesiónes...

No todos mis sumisos buscan este tipo de juego, pero a los más atrevidos me gusta ofrecerles una introducción al spanking. Cuando veo que...

Estás muy excitado, pero no tanto como yo. Dentro de un rato, me ocuparé de tus nalgas con mi varita. Confía en mí, sabré cómo hacer que...

Me encanta hacerme cargo de ellos. Una vez que se dejan atar por las muñecas y los tobillos, no pueden evitar confiar en mí y me implico...

¡Me estás reteniendo totalmente! Tu trasero ... Tu polla... Y tienes que confiar en mí sabiendo que tengo una verdadera predilección por...

Tu deseo de someterte no es una debilidad, sino un arte. Un arte que solo unos pocos entienden y saben manejar. En mis manos, encontrarás...

Te has dejado inmovilizar para entregarte por completo a mi varita. Y he ido aumentando mi poder poco a poco desde el inicio de la sesión...

Yo los comprendo. Y debes saber que nunca obligo a ningún sumiso a aceptar una práctica que no desea. Pero tengo que decir que después de...