Desde la primera sesión, son muy dóciles. Se desnudan delante de mí y se dejan esposar a la espalda. Hago desaparecer sus rostros bajo una cofia para que sólo se conviertan en objetos para mí y que estén en condiciones de mostrarme cuánto desean adorarme...
Señora Artemisa
Si tú también quieres ser uno de mis adoradores, ponte en contacto conmigo: https://domina-artemisa.wixsite.com/my-site/about-3-2
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