top of page

Ese día que te convertiste en cornudo, yo no llevaba bragas

ree

Enseguida me di cuenta de que aquel chico, al que no conocía, sentía un gran deseo por mí. Y como este deseo era mutuo, cedí a sus avances. Me cogió por detrás al tiempo que me subía la falda. Me folló profundamente.


Si quieres ser tratado como un cornudo, contacta con la Señora Artemisa: https://domina-artemisa.wixsite.com/my-site/about-3-2

Comments


bottom of page